Asesinadas, rapadas, torturadas y encarceladas. En 3 años y nada más que en el Convento de Santa Clara, pasaron 2700 mujeres después de ser juzgadas en los Consejos de Guerra franquistas. Centenares fueron a la Prisión Provincial de Muejres y al Reformatorio Especial de Muejeres del Puig. La mayoría fueron condenadas a penas de entre 12 y 20 años.